sábado, 9 de julio de 2016

Capítulo Treinta y Siete.

-Lo sé, sé que no buscaste estar aquí pero...-alcanzó a decir para luego dar un frustrante suspiro-No quiero estar mal contigo, pero compréndeme, es desesperante ver como disfrutar estar cerca de ese tipo-expresó frunciendo el ceño-

Cansada ya de dar tantas explicaciones la joven Gilbert se acostó y se dispuso a dormir, por lo menos lo intento ya que le llevo tiempo pero cuando finalmente concilió el sueño pudo sentirse tranquila, ya que por lo menos allí no recibía reproches por parte de sus compañeras.

A la mañana entrante todas fueron despertadas para que iniciaran con sus tareas diarias, las que consistían en limpiar el lio de la noche anterior, todas tuvieron que hacerlo aunque ________ después de unos minutos dejo de limpiar para conversar con Stuart, ya que así este lo solicito.

-¿Y bien? ¿pudiste solucionar todo con las demás?-pregunto con curiosidad-
-Mas o menos-respondió con bastante desanimo la morena-Solo no te entrometas-le pidió manteniéndose seria mientras lo miraba del mismo modo-
-De acuerdo-musito este poco conforme con su elección-
-Si es todo voy a regresar, luego me castigan si no limpió-dijo _________ dando media vuelta para dirigirse a su labor nuevamente pero él la detuvo-
-No te castigaran, estas conmigo-expuso con obviedad mientras le sonreía-
-De eso es de lo que hablo, esto es de lo que hablan todas-dijo ella frunciendo el ceño-Yo soy la consentida-reconoció -Y no quiero serlo. Aunque me agraden tus buenos tratos, que regañes a los otros para defenderme o...o no sé, esos paseos, yo no quiero ser odiada por ellas-expresó mostrándose apenada al respecto-
-Si te odian por eso es porque no se interesan por ti, porque si lo hicieran, si ellas fueran verdaderas amigas como tú crees entonces no harían este escandalo por el simple hecho de que me agrades, de que yo te agrade, porque eso esta fastidiándoles, el que yo este agradándote-garantizo con suma convicción-
-No digas eso-pidió con angustia ahora la joven Gilbert-Ellas son lo único que tengo en este lugar, son lo único bueno. Lo único que me mantiene más o menos estable en este infierno es la amistad de Julia y Kimberly-expresó-Sin ellas yo estoy sola-expuso con su mirada empañada, Stuart la miro y negó con su cabeza-
-Tú no estas sola-aseguro acercándose para acariciar su rostro-Lo quieras o no yo estoy contigo, y así será siempre-garantizo en casi un susurro inclinándose para tomar mayor proximidad-

La morena no se aparto, permaneció escuchándolo en silenció y dejando luego que él la besara. No se sentía bien y además tenia ganas de besarlo, más aun luego de oír sus dulces palabras asique acepto su beso y lo correspondió dejándolo bastante alegre al hombre.

-Yo en verdad te quiero, __________-expreso cuando terminaron aquel dulce beso, la chica por su parte solo quedo observándolo y oyendo con detenimiento sus bonitas y aparentemente genuinas palabras-

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Suerte!Besos(: